Durante los días 28 de febrero y 1 de marzo pasados, en el Centro Nacional de Microbiología del Instituto de Salud Carlos III de Madrid, tuvo lugar la V Reunión Científico-Técnica de la Red de Laboratorios de Chagas, destinada a profesionales que trabajan en el diagnóstico de laboratorio de esta enfermedad.
En el acto de inauguración estuvieron presentes el Responsable del Programa de Control de Chagas de la OMS, Pedro Albajar; la Directora del Centro Nacional de Microbiología del Instituto de Salud Carlos III, Isabel Jado y el Director Ejecutivo de Mundo Sano en Argentina, Marcelo Abril.
Para comenzar las sesiones de intercambio y debate, Pedro Albajar remarcó “Nos quedan 8 años para llegar a la conquista de los Objetivos de la Hoja de Ruta de la OMS, los animo a generar protocolos que sean escritos por todos los actores involucrados en este escenario de revolución digital y de avances en bioingeniería que generan un desafío y a la vez una oportunidad”.
A lo largo de las dos jornadas, se expusieron casos testigos en distintos territorios de España en relación al trabajo diagnóstico de la enfermedad de Chagas de los laboratorios de microbiología, a la labor multidisciplinar con otras áreas de profesionales de salud involucrados en el trato con los pacientes y se debatió sobre los estudios intercomparativos de diversas técnicas de laboratorio y sobre los conceptos operativos, entre otros temas.
Fundación Mundo Sano fue invitada a exponer sobre la iniciativa iberoamericana “Ningún Bebé con Chagas”. En su presentación Marcelo Abril, Director Ejecutivo de Mundo Sano en Argentina, señaló “Es importante tener una actitud proactiva para incentivar, hacer sinergia, aprender y tener un horizonte compartido para eliminar la enfermedad de Chagas. Esta iniciativa busca impulsar a que se hagan las cosas que deben ser hechas”.
A modo de resumen de los próximos desafíos de la Red de Laboratorios de Chagas, se han enumerado posibles contribuciones que se pueden desarrollar, tales como: finalizar la lista de las pruebas de diagnóstico esencial de la OMS, actualizar la lista (luego de la pandemia) de los diagnósticos esenciales disponibles, realizar un glosario consensuado de conceptos clave y comunicarlos en forma de documento de consenso, entre otras.